[Este artículo fue editado y publicado en agosto de 2016 por THE ASSOCIATED PRESS]
Por ALEX OLLER
RIO DE JANEIRO (AP) – Largo tiempo privada de participar en los Juegos Olímpicos por sus insuficientes resultados en las respectivas fases clasificatorias, Cuba finalmente puede decir “presente” en el voleibol masculino en Rio 2016.
Pero, pese a que logró sellar su boleto por primera vez en dos décadas, lo pronuncia sin excesiva fiesta, casi con la boca pequeña y en voz baja. Y es que “presentes” no están todos los que se esperaba estuvieran representando al país isleño en el torneo.
“Vamos con mucha alegría, disposición y buena actitud, sin presión alguna”, proclamó el viernes el seleccionador Nicolás Vives, tras entrenar en las instalaciones del club de las fuerzas aéreas de Río, a dos días del debut frente a Rusia.
La presión quizás no acompañe a la docena de jóvenes seleccionados, pero la polémica está servida desde hace semanas para el combinado cubano, cuya preparación se vio seriamente perjudicada por el escándalo de un supuesto intento de violación que salpicó a seis jugadores que permanecen detenidos en Finlandia, donde participaban de un torneo a comienzos de julio.
Entre los encarcelados se encuentra Rolando Cepeda, quien juega en la liga profesional de Grecia y fue nombrado el jugador más valioso en el Preolímpico de Edmonton, torneo que Cuba ganó sin perder un solo set.
“Ese es un tema que no puedo tocar”, zanjó Vives al ser preguntado sobre si había mantenido contacto con los arrestados.
Oriundo de La Habana, Vives entró en escena cuando el escándalo se cobró la destitución de los anteriores preparadores, Rodolfo Sánchez y Pavel Pimienta, nada más regresar la expedición a la isla.
Pero, pese a que la actual situación dista lejos de ser la ideal para afrontar una justa olímpica, el nuevo seleccionador siente que el equipo llega listo para competir y sellar el boleto a la segunda fase.
“Estamos tranquilos. A pesar de las circunstancias y de que este es un equipo extremadamente joven, los chicos están concentrados. Van a dar lo mejor de sí y van a luchar para ganar cada partido. Física y psicológicamente están bien. El objetivo es estar entre los ocho primeros”, declaró Vives, quien formó parte de la última selección en disputar unos Juegos. Fue en Sidney 2000, cuando Cuba logró el séptimo lugar.
“En 2004 no conseguimos clasificar porque éramos también un equipo joven e inexperto, y en 2008 perdimos partidos muy apretados con Alemania. Ganó el mejor”, reconoció Vives.
Aquel logro hace 16 años en Sidney queda ya lejos en la memoria para Cuba, imposible incluso de recordar para un buen número de sus actuales seleccionados. Solo tres jugadores, Darienn Ferrer, Mario Rivera y Reinier Rojas, superan la treintena de años, mientras que cinco aún no alcanzan los 21, siendo Adrián Goide el más joven del grupo, con 18 recién cumplidos.
Precisamente Goide dio el susto en el entrenamiento, del que se debió retirar al realizar un mal gesto con el tobillo derecho; pero Vives adelantó que el pasador titular estaría listo para el estreno dominical. De hecho, la selección abandonó con prisas la sesión preparatoria, pensando ya en ir engalanándose de cara al desfile de la ceremonia de apertura de los Juegos en la tarde.
El voleibol es el único deporte por equipos en que Cuba clasificó a Rio 2016, y durante algunos días llegó a planear la duda sobre si el Comité Olímpico Internacional echaría al combinado debido a la cantidad de jugadores implicados en el supuesto incidente de julio.
Cuba finalmente no sufrió la descalificación y actualmente integra el grupo B, donde también figuran Polonia, Rusia, Argentina, Irán y Egipto.
El Grupo A lo forman el anfitrión Brasil junto a Italia, Estados Unidos, Canadá, Francia y México.
Los cuatro primeros de cada grupo clasificaran a la fase clasificatoria.
“Nuestro grupo es complicado, y muy parejo. Estos Juegos son muy difíciles de predecir. Tenemos equipos excelentes como Rusia, Polonia, Francia y Brasil, que juega en su casa”, analizó Vives.
Tras el entrenamiento de Cuba se personó en las instalaciones precisamente el equipo Argentina, con quien los isleños se medirán el siguiente sábado, en su cuarto partido del torneo.
“No los conozco, pero sé que son muy jóvenes y están viviendo una situación muy complicada”, comentó el preparador albiceleste, Julio Velasco, sobre Cuba. “Con todos al completo, eran un equipo de nuestro nivel, como Irán. Los que están siguen siendo buenos, aunque sin experiencia. Pero los cubanos siempre son peligrosos, un equipo muy aguerrido y físico, y tienen todo nuestro respeto”.
Si ambas selecciones podían aparentar, como sostiene Velasco, un nivel similar antes del torneo, las bajas de Cuba decantan en principio la balanza del lado argentino.
Y si ambos entrenamientos sirven de indicativo, los jugadores suramericanos se mostraron algo más activos y sonoros en su desempeño que los cubanos, donde la voz predominante en la sesión fue la de Vives.
Seguramente tampoco fuera casualidad, pues el técnico encargado de cambiar el discurso y mejorar el presente del voleibol isleño anda empeñado también en combatir el silencio que envuelve a su equipo… al menos sobre la cancha.